¿Cómo pueden identificarse eventuales problemas que aparezcan en las estructuras?
Los fallos que puedan ir apareciendo a lo largo de la vida útil de una estructura pueden identificarse, básicamente, de tres formas: mediante la realización de inspecciones, la realización de ensayos no destructivos y/o mediante la monitorización de la estructura.
Las inspecciones, programadas y no programadas, constituyen el método que, de forma tradicional se ha venido utilizando para vigilar las estructuras (ver capítulo 6 de esta misma guía para ampliar la información), pero en las últimas décadas, cada vez en más construcciones se están complementando con la monitorización.
En este sentido, la monitorización durante la fase de servicio de una estructura resulta vital para realizar un buen seguimiento de la estructura y detectar eventuales problemas que puedan aparecer, ya sean imprevistos o “fallos normales” debidos al envejecimiento estructural.
Dicha monitorización proporciona información sobre el comportamiento estructural, pudiendo identificarse fácilmente la acción de cargas imprevistas de cualquier índole, así como sus efectos estructurales.
Los datos obtenidos durante las inspecciones y la monitorización de las estructuras son útiles para la detección de daños, evaluación de la seguridad y determinación de la capacidad residual de las estructuras. La detección temprana de daños es particularmente importante porque conduce a intervenciones apropiadas y oportunas. Si el daño no es detectado, continuará propagándose y no podrán garantizarse los niveles prestacionales requeridos.
La detección tardía del daño da como resultado una reparación muy costosa y, en algunos casos, la estructura tiene incluso que ser cerrada y desmantelada.
Además, tal y como se ha indicado en el apartado anterior, una estructura puede arrastrar fallos ya desde su construcción si estos no han sido detectados en el momento. Una posterior monitorización puede detectar dichos problemas y, en aquellos casos en que la estructura no ha sido monitorizada durante su construcción, puede servir como base para la comprensión del presente, así como para para establecer una referencia a partir de la cual se detectan futuros comportamientos estructurales anómalos.