Fases de la monitorización de estructuras
¿De qué fases consta la monitorización de estructuras?
Todo proceso de monitorización de una estructura consta de las siguientes fases:
1. Fase de proyecto
- Definición de las magnitudes a medir y los rangos esperados
- Planificación de las actuaciones a realizar
- Elección del sistema de instrumentación
2. Fase de implantación
- Coordinación previa a la puesta en marcha de los equipos
- Ubicación e instalación final de los equipos
- Realización de una inspección
- Supervisión e interpretación de los hallazgos de la inspección
3. Fase de explotación
- Obtención de datos de instrumentación
- Gestión, traducción e interpretación de datos
- Seguimiento y evaluación de resultados
¿En qué estructuras se puede llevar a cabo una monitorización?
La realidad es que se pueden monitorizar todo tipo de estructuras, como pueden ser edificios, puentes, viaductos, presas, etc. De esta forma podemos aportar una información valiosísima de cara a su mantenimiento y a la extensión de su vida útil.
Pero, más allá del sector de la construcción, también pueden monitorizarse otro tipo de estructuras: aeronaves, en el sector aeronáutico; aerogeneradores, en el sector de la energía; y así con una larga lista. Por lo que las posibilidades de la monitorización estructural son infinitas.
No obstante, sí cabe señalar que para que esta monitorización sea útil es imprescindible, no sólo realizar la fase de instrumentación y colocar los equipos de monitorización adecuados para obtener los parámetros buscados, sino que dicho proceso debe comenzar con el estudio, objetivo y definición de las necesidades y, tras la implementación de los sensores y adquisición de los datos, realizar el correspondiente procesamiento para convertirlos en una herramienta útil en el mantenimiento y gestión de estructuras que permitan la toma de decisiones informada.